martes, 26 de septiembre de 2017

Contagiando la pasión por aprender juntos. (Entrevista a Loana Ferrero)



Al igual que en los años anteriores, este año seguiremos con la publicación de entrevistas realizadas a docentes y a estudiantes, como insumos para la reflexión sobre nuestras prácticas y sobre los aprendizajes. Las respuestas de docentes y estudiantes, sujetos directamente involucrados en las prácticas sobre las cuales nos proponemos reflexionar en este Blog resultan fundamentales para profundizar el grado de análisis. Claro que podemos estar de acuerdo o no, claro que podemos disentir con determinadas apreciaciones y reconocer en las respuestas (y en las preguntas) posicionamientos pedagógicos e ideológicos compartidos o no pero de cualquier manera, los relatos en primera persona son siempre insumos de gran valor para construir y (re)pensar nuestros propios posicionamientos. En este caso es un placer publicar la entrevista que gentilmente respondió Loana Ferrero *.

En sus primeras reflexiones, Loa nos muestra lo relevantes que son para ella l@s docentes en la manera en que l@s estudiantes se vinculan con los contenidos de las materias y resalta el valor de la “pasión” que l@s docentes deberíamos tener y/o demostrar para motivar a l@s estudiantes. 

  • Loa, ¿Qué es para vos “ser docente”?
  • No puedo describir lo que para mí significa ser docente, porque a lo largo de mi vida tuve profesores de todo tipo, con algunos aprendí muchísimo y con otros todo lo contrario. No creo que haya una definición correcta para lo que significa ser docente, pero sí puedo decir lo que para mí tendría que significar serlo. Desde mi punto de vista de estudiante, para mí un docente tiene que ser una persona que enseña algo que le apasiona, que desea compartir sus ideas, experiencias y conocimientos. Todos tenemos alguna materia que nos encanta y tal vez otras que nos cuestan o que no nos gustan, pero yo creo sinceramente que no es el contenido lo que describe a una materia como difícil, aburrida o divertida, sino el profesor. El docente es 100% la asignatura que enseña y tiene el poder de hacer que a los estudiantes les guste, les apasione y aprendan.

  • ¿Qué características creés que debería tener un docente para ser mejor como facilitador de los aprendizajes de l@s estudiantes?
  • Creo que un profesor debe ser inspirador, y amar lo que enseña, porque si un profesor no le gusta lo que enseña, a sus estudiantes no les va a gustar aprenderlo. Es increíble la cantidad de profesores que hay a los que no les importa en lo más mínimo si nos importa o no su materia, si la aprobamos o no, si nos cuesta o no. Estar un poco involucrado y tener un mínimo de respeto por su propia materia es necesario para ser profesor. Creo que esto facilita el aprendizaje porque ningún estudiante quiere decepcionar a un profesor que lo inspira, aprender y hacer bien las cosas es una especie de ‘’recompensa’’ para ese profesor que de verdad se involucra en el aprendizaje.

A la hora de pensar en cambios concretos que habría que realizar para aumentar la participación de l@s estudiantes en las clases, Loa prioriza una planificación didáctica que contemple los intereses de l@s estudiantes y l@s invite a participar y engancharse con la clase y con las actividades propuestas..

  • Si tuvieras que hacer una propuesta de cambio concreto que pudiera aumentar el compromiso, la motivación y la participación tuya y de tus compañer@s, ¿qué propondrías y por qué?
  • Si tuviese que hacer un cambio concreto que pudiera aumentar el compromiso, la motivación y la participación de mi curso, sería que los profesores tengan que planear sus clases de principio a fin anticipadamente con actividades dedicadas a facilitar nuestra comprensión sobre determinados temas. Hacer clases dinámicas que enganchen tanto a los alumnos como al profesor. Salir a dar clases afuera también me parece una idea divertida y realizar excursiones.

Cerrando la entrevista, Loa nos invita a ver “Merlí” y a pensar una Educación que vaya más allá de estudiar y aprobar materias y nos prepare para la Vida real mientras disfrutamos de la “experiencia” escolar.

  • Si tuvieras que recomendarle a l@s docentes un libro, una canción o una película que considerás “relevante” para mejorar la práctica docente, ¿qué libro, canción o película nos recomendarías y por qué?
  • Si tuviese que recomendarle a algún profesor una serie, les recomendaría Merlí, porque trata de un profesor que tiene una mirada distinta, más realista, si se quiere, sobre la educación y sobre el modo en el que ésta se debe dar.

  • ¿Cuáles son y cuáles “deberían ser”, en tu opinión, los objetivos de la Educación?
  • En mi opinión, los objetivos de la educación tendrían que ser que los estudiantes pasen un buen tiempo en el colegio, aprendiendo no sólo cuestiones teóricas, sino también sobre la vida. Hacerlos sentir que lo que están estudiando les va a servir para algo, no solo para aprobar la materia.

* Loana Ferrero es alumna de 4to año en la Escuela de Educación Técnico Profesional de Nivel Medio en Producción Agropecuaria y Agroalimentaria; sin imaginación para poner algo más relevante sobre si misma además de esto.

martes, 19 de septiembre de 2017

¿Cómo aprende Silvina? Involucrarnos, perseverantemente, con todo lo que gira alrededor de lo que estamos aprendiendo.



Desde 2014 el Blog viene publicando textos que reflexionen sobre “cómo aprendemos”. Como dijimos en varias entradas anteriores pareciera ser que much@s docentes creemos (con las mejores intenciones) que debemos ser facilitadores de los aprendizajes y obramos o creemos que obramos (en consecuencia) con el objetivo de que nuestr@s estudiantes aprendan.

Sin embargo, no tenemos muy en claro “cómo se aprende”, qué hacen nuestr@s estudiantes para aprender, cómo hacen nuestr@s estudiantes para aprender los contenidos (disciplinares, actitudinales y de procedimientos) de nuestras materias.

Es por eso que nos proponemos darle una vuelta de tuerca a esta reflexión a partir de relatos, en primera persona, que den cuenta de cómo aprendemos o cómo aprenden l@s estudiantes, con el objetivo de ser mejores facilitadores de esos aprendizajes (cada vez más significativos) en nuestr@as estudiantes, cada vez más autónomos. En este caso la reflexión es a partir del relato que gentilmente escribió Silvina Niedzwiecki *.


Cuando Sil reflexiona sobre cómo aprende contenidos académicos diferencia, como ya lo hicieran vari@s entrevistados anteriores, entre los contenidos más “teóricos” y los más “prácticos”, y destaca el rol del docente como una guía para la lectura del libro que “a veces se va por las ramas”: “En mi experiencia, tomo dos caminos distintos con respecto a los contenidos ‘teóricos’ y los contenidos ‘prácticos’. Siento que tengo más facilidad para los ‘prácticos’. Por eso, en este camino facultativo, al momento de elegir materias para la cursada intento intercalar, de ser posible, alguna ‘práctica’ con algunas ‘teóricas’. En las prácticas trato de realizar todos los ejercicios que me propongan, no veo otra forma de incorporar conceptos “matemáticos” que haciendo una y otra vez ejercicios y ejercicios. Una vez terminado de estudiar todos los ejercicios, recién ahí agarro parciales anteriores y me pongo a practicar. Con respecto a las materias teóricas, tengo varias técnicas, según los tiempos y la dinámica de la misma. En las clases, tomo apuntes y luego a partir de eso voy a los libros para poder guiarme. A veces, los libros se van por las ramas y es difícil saber hasta dónde abarcar. En esos momentos, consulto con los profes para que me puedan encaminar o alguna amiga que ya haya cursado para así saber dónde frenar (con el fin de economizar los tiempos)”. Sil destaca el rol que juegan los resúmenes y el hecho de exponer oralmente los temas que se están aprendiendo “como si estuviera dando una clase”: “Después de leer libros y resumirlos, hago resúmenes en la compu porque me cuesta mucho estudiar directamente de los libros. Todo lleva a que vaya teniendo en la cabeza los contenidos principales. Cuando se acerca el momento de rendir, me pongo a estudiar ‘más profundamente’. En esta ‘etapa’ suelo utilizar mucho una pizarra y hablar en voz alta, haciendo que le doy clase a alguien. Siempre me sirvió. Lo que implementé ahora es agarrar a alguien familia o amigos y pedirles que me escuchen. Esto me sirve para empezar a perder la vergüenza de los orales”

En las palabras anteriores se advierte el valor que tienen para Sil la realización de resúmenes y la exposición oral como facilitadores de los procesos de asimilación y consolidación de los contenidos que se están aprendiendo. ¿Cuántas de nuestras propuestas didácticas o de las actividades que (habitualmente) les proponemos a nuestr@s estudiantes involucran la utilización de éstas u otras herramientas facilitadoras de los aprendizajes?
 
Cuando piensa en aprendizajes no académicos ni escolares, Sil le otorga un valor central a la repetición y al perfeccionamiento basado en la corrección de errores y en la perseverancia, que culminan con la realización “natural” (sin pensar) de una acción aprendida: “Muchas cosas las aprendí con prueba y error pero siempre con perseverancia. Es decir, un día fui a jugar al hockey sobre patines, no sabía hacer ninguna de las dos cosas pero dije bueno tan difícil no puede ser. Me dijeron tenés que hacer esto y esto. La información la procese bárbaro, ahora que mis piernas coordinaran lo que mi cerebro le pedía era medio complejo. Me acuerdo cuando tenía que aprender a patinar para atrás, ‘tenés que hacer un ocho’ me decían. Yo me paraba en el medio de la cancha y mandaba la señal pero me quedaba dura ahí parada. Hasta que de a poco empezó a salir, cada vez un poquito más rápido y hasta un momento ya lo hacía sin pensar. Lo mismo me paso cuando tenía que frenar de golpe. Al principio, frenaba con el alambrado de la cancha, después empecé a hacer el movimiento con el cual debía frenar, hasta que un día salió y no me golpeé más con nada”.
 
A la hora de pensar, de manera comparativa, los aprendizajes “académicos” y “no académicos”, lejos de ubicarlos en veredas diferentes, Sil los aúna en la importancia de la perseverancia y del esfuerzo que se pone para aprender tanto unos como otros: “Con respecto a las formas de aprender creo que lo primordial que hay en ambos tipos de aprendizajes es la perseverancia. Tanto en el deporte como en la facultad si no sos perseverante te pasa todo por arriba. Quizás, las técnicas pueden ser distintas, pero por ejemplo como dije con los ejercicios prácticos y el deporte es casi lo mismo. Es hacerlo una y otra vez hasta que el “concepto” esté incorporado y después sale solo. Sin darte cuenta estás haciendo lo que primero te frenabas a pensarlo, con el tiempo lo aplicas directamente. Una diferencia que podría rescatar es que no me pongo a repetir en voz alta como patinar como lo hacía con algún concepto académico. Pero seguramente, a la hora de cocinar un bizcochuelo, por ejemplo, al principio podes leer la receta y después de 4 ó 5 bizcochuelos que hiciste ya no tenés que volver a leerla”.

Finalmente, Sil nos deja una reflexión interesante que sigue en la línea de no separar los aprendizajes “académicos” de los “no académicos” y que agrega algo fundamental a la perseverancia y a la repetición, como es la manera en que nos vinculamos con aquello que estamos aprendiendo y, sobre todo, con esos “Otros” con los que (necesariamente) aprendemos: “Realmente a veces uno separa lo que es la facultad o colegio donde ‘se estudia’ de lo que uno hace en su vida donde ‘no se estudia’. Parecería ser que sentarse a estudiar un libro es más complejo que cocinar o hacer un deporte. Pero al final en ambos uno termina incorporando procesos, conocimientos, formas de hacer cosas. Aprendemos todo el tiempo, no solo significa aprender leyendo o haciendo. Creo que aprender nos lleva a involucrarnos con todo lo que gira alrededor lo que estamos ‘aprendiendo’. Aprender a relacionarse con otras personas, aprender a escuchar, aprender a ser respetuosos por el otro y conocer que no solo existe el ‘mundo’ que vive uno. Que hay otras realidades y que no todos actúan ni aprenden en los mismos tiempos ni de las mismas formas que uno mismo”.

* Silvina Niedzwiecki (@niedzsilvina) es estudiante de veterinaria en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UBA, le gusta pintar para desconectarse de todo. Tiene una familia real de perros en su casa (9 en total). Es hincha de Huracán y le encanta ir a la cancha. Futuros títulos: Veterinaria.

martes, 12 de septiembre de 2017

Una relación (cercana) para aprender y (trans)formarse. (Entrevista a Pablo Frígoli)



Al igual que en los años anteriores, este año seguiremos con la publicación de entrevistas realizadas a docentes y a estudiantes, como insumos para la reflexión sobre nuestras prácticas y sobre los aprendizajes. Las respuestas de docentes y estudiantes, sujetos directamente involucrados en las prácticas sobre las cuales nos proponemos reflexionar en este Blog resultan fundamentales para profundizar el grado de análisis. Claro que podemos estar de acuerdo o no, claro que podemos disentir con determinadas apreciaciones y reconocer en las respuestas (y en las preguntas) posicionamientos pedagógicos e ideológicos compartidos o no pero de cualquier manera, los relatos en primera persona son siempre insumos de gran valor para construir y (re)pensar nuestros propios posicionamientos. En este caso es un placer publicar la entrevista que gentilmente respondió Pablo Frígoli *.

En sus primeras reflexiones, Pablo nos recuerda la “responsabilidad” que implica la tarea docente, la importancia de que l@s docentes podamos varias las propuestas metodológicas en función de los grupos y la relevancia del “ambiente” como facilitador (o no) de aprendizajes significativos por parte de l@s estudiantes.

  • Pablo, ¿Qué es para vos “ser docente”?
  • Es la persona encargada de transmitir conocimiento a los estudiantes y la responsable de que estos los aprendan. El docente puede tomar distintos métodos para la enseñanza, estos variarán según el curso que le corresponda, la cantidad de tiempo que le toque con el curso y la personalidad del docente. No es necesario que el docente varíe sus métodos con todos los cursos, si el método le sirve con el curso no es necesario que lo modifique.

  • ¿Cuáles son tus objetivos/propósitos/expectativas de logros cuando comenzás una cursada?
  • Mis objetivos son poder aprender algo, que aunque no sea el contenido específico de alguna materia, sea un método de estudio o una manera de ver o analizar las cosas. Obvio también espero poder saber los contenidos de algunas materias porque estoy todo el día en el cole o por interés o porque se relacionan con otras. También espero disfrutar la cursada que es lo que pasa en general, pero eso es por el ambiente en general. Mi propósito es poder formarme y estar preparado para poder abordar cualquier tema nuevo, no quiere decir que lo vaya a hacer rápido, pero si uno está formado creo que tendría una facilidad para adentrarse a los temas, ya sea por conocimientos previos o el método de estudio.

A la hora de pensar en las características que deberíamos tener l@s docentes, Pablo rescata la empatía y la capacidad de construir vínculos cercanos con l@s estudiantes así como la capacidad de captar la atención de l@s estudiantes durante gran parte de la clase ofreciéndoles (por ejemplo) instancias para poner en práctica lo que están aprendiendo.

  • ¿Qué características creés que debería tener un docente para ser mejor como facilitador de los aprendizajes de l@s estudiantes?
  • Los mejores docentes que tuve son los que te integran a la clase y mantienen una cercanía con el alumno en cuanto a que no toman una especie de distancia de superioridad por su cargo y no te marcan tampoco esa distancia dando temas por supuestos o llenándote de vocabulario técnico de manera que hace que uno se pierda, es decir, dan algunos temas por supuestos e inculcan constantemente vocabulario técnico pero de manera asimilable, no es que dan un material de lectura y se basan de que todos lo tienen por supuesto. Otra característica que tiene un buen profesor es que mantiene atento toda o casi toda la clase en la mayoría de la clase. Una técnica que a mi criterio facilita mucho el aprendizaje y evita que los oyentes se dispersen por falta de entendimiento o que se vayan con algo ya incorporado es la repetición de los nuevos contenidos y de las nuevas definiciones, por ejemplo, es lo que hace mucho el profesor de matemática, cuando da una nueva palabra como por ejemplo “espacio muestral” a medida que lo va explicando y cuando se comienza una nueva clase siempre va refrescando el significado y la aplicación. También, todo lo que sea práctico lleva a que el alumno implemente o vea en desarrollo lo teórico y es un modo muy efectivo de aprendizaje, como cuando vimos la teoría y después la práctica de inseminación artificial.

Cerrando la entrevista, Pablo cuestiona el horario de ingreso a la (mayoría de) las Escuelas secundarias alegando la importancia de cumplimentar una (mínima) cantidad de horas de sueño y nos invita a proponer en clase juegos o competencias en donde l@s estudiantes aprendan y se diviertan.

  • Si tuvieras que hacer una propuesta de cambio concreto que pudiera aumentar el compromiso, la motivación y la participación tuya y de tus compañer@s, ¿qué propondrías y por qué?
  • Uno de los cambios que habría que probarlo pero creo que resultaría es el cambio del horario de ingreso a la institución, que en vez de ser a las 7 30 sea a las 9, si bien el horario de salida sería más tarde creo que uno aprovecharía mucho más el día ya que son muy pocos los alumnos que conozco que duermen 8 hs y una gran parte no llega ni a dormir las 7, lo que provoca que uno se encuentre en un estado como de autismo en las horas de clase. Y esto se ve más destacado en semanas de evaluaciones ya que el alumno por falta de organización termina estudiando hasta la trasnoche para la evaluación del día siguiente y así sucesivamente hasta que termine la semana, provocando que el estudiante solamente rinda para la evaluación sin poder prestarle tanta atención al resto de las materias. Por ahí esta no es la solución porque o no resulta o no es la adecuada, pero creo que los alumnos aprovecharán más el día e incorporaría mejor el conocimiento. Estaría bueno también que haya tipos de juegos o competencias por algo como el que hicimos en bioquímica (un juicio por jurados a las macromoléculas), ya que la competencia puede ser una de las formas que logra que el alumno se comprometa y el modo de juego hace que se disfrute más el momento de aprendizaje. Otro cambio que propondría es implementar un método que nos ayude a ampliar el lenguaje y a exponer ideas y conceptos que queremos transmitir, con mayor facilidad, ya que la falta de vocabulario y de oratoria, termina siendo una traba al momento de exponer un tema o dando como resultado desarrollos muy simples o muy rebuscados, por no saber utilizar las palabras y los conceptos precisos.

  • ¿Cuáles son y cuáles “deberían ser”, en tu opinión, los objetivos de la Educación?
  • Los objetivos de la educación es que uno aprenda, se forme y tenga las herramientas necesarias para resolver la mayor cantidad de situaciones que se le presenten. Y en tanto a aprender, no es solamente lo teórico, sino a cómo relacionarse con los demás, como exponer las ideas y a tener un pensamiento propio, una buena capacidad de razonamiento y estar apto para afrontar poder abordar cualquier tema nuevo.

* Pablo Frígoli es alumno de la Escuela de Educación Técnico Profesional de nivel medio en Producción Agropecuaria y Agroalimentaria (UBA). Está cursando el nivel 4 del laboratorio de idiomas en el área de inglés (UBA). Se encuentra cursando el nivel 1 del instituto superior de música José Hernández especializándose en el instrumento piano. Tiene una gran atracción por la veterinaria y las ciencias duras y uno de sus mayores gustos es por la música (Rock Nacional en preferencia) y los deportes.

martes, 5 de septiembre de 2017

Personalizando las propuestas docentes. Microentrevista a Matías Tellado.

Una de las novedades de este 2017 es la publicación de microentrevistas audiovisuales realizadas a docentes y a estudiantes, como insumos para la reflexión sobre nuestras prácticas y sobre los aprendizajes.
Las respuestas de docentes y estudiantes (sujetos directamente involucrados en las prácticas sobre las cuales nos proponemos reflexionar en este Blog) resultan fundamentales para profundizar el grado de análisis. Claro que podemos estar de acuerdo o no, claro que podemos disentir con determinadas apreciaciones y reconocer en las respuestas (y en las preguntas) posicionamientos pedagógicos e ideológicos compartidos o no pero de cualquier manera, los relatos en primera persona son siempre insumos de gran valor para construir y (re)pensar nuestros propios posicionamientos. En este caso es un placer publicar la entrevista que gentilmente respondió Matías Tellado *.





* Matías Tellado (@matiastellado) es Veterinario y docente en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UBA. Es oncólogo veterinario (www.vetoncologia.com), apasionado por la investigación aplicada en veterinaria y ferviente promotor de la optimización de los tiempos para una vida placentera.